¿De qué depende el confort en un hogar?

Confort: Aquello que produce bienestar y comodidad material.

Para muchos de nosotros, el hogar es el lugar donde refugiarnos y protegernos del exterior, donde relajarnos y disfrutar de compañía especial. Pero… ¿Es realmente nuestra casa un lugar confortable?

Lamentablemente son muchas las viviendas que no cumplen al 100% todas las expectativas de sus habitantes, dejando de ser confortables para ellos. Para que una vivienda sea confortable, tenemos que tener en cuenta varios factores como la humedad, los aislamientos, el clima, la iluminación… Factores que se deben tener en cuenta desde el primer momento de la construcción.

El ruido, junto a la climatización, altera la comodidad en una vivienda, por ello es importante que los niveles acústicos sean correctos así como una buena temperatura, contribuyendo a crear una estancia confortable.

El confort acústico es para una persona una percepción o sensación que sólo se manifiesta cuando falta o apenas se percibe, pero la falta de silencio afecta a todos por igual: alteración del sueño, distorsión del descanso, distracciones, falta de concentración… Gracias al aislamiento acústico, podemos tener un hogar completamente acondicionado que facilite nuestro día a día.

En cuanto a la climatización, no sólo depende de aparatos eléctricos o del sellamiento de puertas y ventanas, sino que también depende en gran medida del grado de aislamiento térmico de la vivienda, así como su orientación.

A día de hoy, gracias a los avances y la gran variedad de soluciones constructivas, en la construcción ya podemos llegar al nivel de confort deseado a un coste energético y económico accesible.