Impermeabilización líquida, la estanqueidad de la cubierta, más fácil

BMI Sealoflex es nuestra gama líquida, que está experimentando un gran crecimiento con gran aceptación por parte de profesionales y particulares. Una solución idónea como sistema completo o para refuerzo de otras soluciones, tanto en obra nueva como rehabilitación. 

Es que la impermeabilización líquida es simplicidad en sí misma. Aplicación, directamente con rodillo o pistola, lo que facilita llegar a todos los rincones, ángulos y encuentros. Por eso es de gran ayuda en cubiertas pequeñas o de formas complicadas y superficies limitadas donde cuesta mucho impermeabilizar con láminas, por la gran cantidad de cortes y ajustes que necesitarían. Acabado sin juntas, formando una superficie única, continua y homogénea en toda la cubierta plana, que garantiza la estanqueidad del conjunto.

Adaptabilidad, es compatible con cualquier tipo de soporte; con hormigón, madera o hierro, con otros tipos de impermeabilización sintética o bituminosa…

Todas las soluciones de BMI Sealoflex son de aplicación en frío, una de sus mayores ventajas. 

Todas nuestras soluciones de BMI Sealoflex son de aplicación en frío, y ésta es una de sus mayores ventajas. 
En el momento de sellar la cubierta plana de un edificio, la rapidez es un factor clave. Si es obra nueva, hay que proteger cuanto antes los trabajos en el interior, pero si el edificio ya está habitado, en uso, es más importante aún garantizar la seguridad y el confort de sus usuarios cuanto antes.Las soluciones de BMI Sealoflex son de fácil aplicación y de rápido curado en frío, incluso de aplicación “wet on wet”. Así los trabajos terminan antes, con el consiguiente ahorro de costes de obra, o de deterioro.

El curado en frío hace posible además incorporar distintos acabados a la cubierta. Hablamos de colores, satinados, mates, e incluso de texturas granuladas o rugosas.Por último, es fundamental garantizar la seguridad de las personas que instalan la cubierta plana y aquí BMI Sealoflex es también la mejor opción. No se necesita fijación mecánica con tornillos ni rosetas; tampoco hace falta ningún tipo de soldadura tradicional ni por inducción. Los instaladores profesionales quedan por tanto a salvo de quemaduras, cortes y otras lesiones.